Otoplastia. Cirugía plástica de la oreja
El Dr. Cerqueiro ha introducido la técnica de otoplastia sin cicatrices lineales utilizando hilos de sutura, en dicha técnica utiliza instrumentación de microcirugía para promocionar los mejores resultados. En la corrección de las orejas prominentes, también denominadas en asa o de soplillo, existen variadas alternativas con y sin cirugía. Si el cartílago no es modelable de forma permanente con métodos no quirúrgicos contamos con una eficiente alternativa, la otoplastia con cicatrices puntiformes y no visibles.
Las principales ventajas de ésta nueva técnica sobre la de otoplastia tradicional son las siguientes:
Sin cicatrices y mínimamente invasiva: Se realiza a través de micro-punciones no precisando de las incisiones tradicionales ni siquiera en la parte posterior de la oreja. Es por este motivo que no produce cicatrices visibles en ningún aspecto de la oreja.
Anestesia local: Se realiza con anestesia local y en régimen ambulante, al menos en pacientes de edad superior a los 8 años.
Sin vendajes: El paciente no precisa de vendaje post-cirugía durante el día, de modo que abandona la clínica sin vendas ni apósitos visibles y tampoco los necesita durante actividades cotidianas.
Los resultados son naturales: Es aplicable a la inmensa mayoría de pacientes con orejas prominentes (más del 95%).
La recuperación es muy rápida con índices mínimos de molestias.
Si fuese preciso se pueden realizar ajustes utilizando la misma técnica mínimamente invasiva.
Con ésta técnica son prácticamente inconcebibles problemas como el sangrado excesivo o la formación de cicatrices hipertróficas o queloides, siendo aplicables éstos riesgos a la técnica de otoplastia tradicional.
La corrección unilateral o bilateral de la oreja prominente es uno de los procedimientos más comunes en cirugía plástica y la realizamos para corregir la excesiva prominencia de la oreja.
La reducción del lóbulo de la oreja es solicitada por pacientes que bien por el uso de complementos de moda, bien con el paso del tiempo, han desarrollado un no deseado alargamiento del lóbulo auricular y asimismo de la oreja en su conjunto.
La naturaleza del procedimiento y la técnica elegida es ajustada a los problemas de forma a corregir en cada paciente en particular. El objetivo es un resultado natural evitando por encima de todo la apariencia de una oreja operada.
Los elementos a corregir con esta cirugía incluyen: una concavidad profunda de la parte central de la oreja (concha), una carencia de desarrollo de la doblez periférica de la oreja (pliegue del ante-helix) y varios problemas que se pueden dar en el desarrollo del cartílago.
La operación puede ser realizada frecuentemente sin la necesidad de pernoctación hospitalaria.
La operación se realiza en pacientes de cualquier edad, salvo en el recién nacido, dado que el cartílago de éste no está suficientemente formado, siendo posible moldearlo con una férulas diseñadas al efecto, corrigiendo la oreja prominente sin necesidad de cirugía.
Normalmente se practica la operación en una de dos etapas de la vida: Si se plantéa la deformidad en una etapa inicial se realiza cuando el niño está en edad preescolar 5 – 6 años. Ésta es la época de la infancia más comúnmente elegida para este procedimiento.
En el adulto la corrección es también común y tiene la ventaja de poderse realizar con anestesia local, con o sin sedación.
Este procedimiento de cirugía plástica dura entre una y dos horas, dependiendo también de la anestesia que se utiliza para la otoplastia. Varias técnicas de moldeamiento del cartílago son utilizadas en función de la deformidad e incluyen las suturas internas, la escultura auricular de la porción tratada, el cambio en la orientación o la reposición de partes del soporte estructural de la oreja.
La reducción del lóbulo de la oreja se puede realizar satisfactoriamente con anestesia local y en régimen ambulatorio. Es un procedimiento de una duración inferior a una hora. También realizamos esta operación generalmente en combinación con otros tratamientos de rejuvenecimiento.
Dado que el niño de corta edad no puede cooperar esta operación se realiza en estos pacientes con anestesia general y en medio hospitalario. Si la otoplastia se realiza en el adolescente o el adulto, se trata con anestesia local con un satisfactorio grado de tolerancia.
Nuestros anestesistas están altamente cualificados en operaciones de cirugía plástica y en el caso de los niños disponemos de anestesistas pediátricos.
Después de la otoplastia no hay dolor pasada la primera noche. En el caso de otoplastia sin cicatrices una venda o banda deportiva es sólo necesaria durante el sueño. Por lo contrario, en el caso de utilizarse la otoplastia tradicional debes usar un vendaje durante los primeros 6-7 días.
Este mantiene una compresión suave sobre la zona operada. Es recomendable el uso de una ancha banda deportiva (tipo tenista) para dormir en los 1-2 meses que siguen a la cirugía. El cambio inicial en el color de la piel desaparece progresivamente durante los diez días siguientes a la operación. En el paciente adulto la vuelta al trabajo se programa normalmente después de una semana. En el caso de otoplastia mínimamente invasiva sin cicatrices la reintegración laboral podría ser viable a las 24-48 horas.
La incidencia de complicaciones en otoplastia es notablemente baja. La corrección puede en casos excepcionales no permanecer, y entonces es posible repetir el procedimiento. Los problemas cicatriciales, de curación y la infección son muy infrecuentes. El Dr. Cerqueiro repasará contigo todos estos aspectos durante la consulta, valorando tu caso de una forma personalizada.